Y la sorpresa es: ¡un vídeo sorpresa!

Muchas veces los fotógrafos y videógrafos de bodas nos encontramos con esta sorpresa (nunca mejor dicho) que o bien los amigos y familiares les dan a los novios, o bien los novios les dan a los amigos y familiares.

Como ya son unos cuantos años de experiencia haciendo bodas, y como con estos vídeos ha pasado de todo, si has llegado hasta aquí, buscando cómo hacer un vídeo sorpresa para bodas, te dejo una serie de recomendaciones para que no caigas en los mismos errores en los que han caído otros. No tropieces dos veces en la misma piedra.

Vídeo sorpresa para bodas

En primer lugar si queréis hacer un vídeo sorpresa para bodas, aseguraos de que el restaurante o salón está preparado para proyectarlo. Puede parecer una tontería, pero nos hemos encontrado montones de veces con proyecciones que no se ven y que no se oyen, por que a pesar de que el encargado de realizar el vídeo ha llevado todo lo necesario, proyector, pantalla, ordenador… no ha tenido en cuenta que el sonido de su ordenador portátil no tiene calidad suficiente, o simplemente, que a la hora de conectar el ordenador al equipo de sonido del salón, o bien el cable no llega, o bien no tiene las conexiones adecuadas.

Consejos para un vídeo sorpresa para bodas

Una de las cosas más importante es que tenéis que tener en cuenta el tiempo. No cometáis el error de por recopilar recuerdos y anécdotas hacer un vídeo de media hora. Independientemente de la calidad técnica del vídeo, un vídeo corto, de unos dos o tres minutos es ameno. Uno de 15 minutos, en uno de los momentos de más bajón de la boda (se suelen proyectar en el postre, con la gente deseando tomarse una copa) no es lo más indicado para animar el ambiente.

Muchas veces los encargados de hacer el vídeo os ponéis a recopilar fotos y recopiláis tantas y las queréis meter todas, que se os va de la mano. Y sobre todo, muchas veces ponéis fotos con muy mala calidad. Tanto si las escaneáis, como si son imágenes ya digitales, aseguraos de que tienen alta resolución para que el vídeo tenga calidad.

Si además de fotos, el vídeo incluye vídeos o bien grabados por las personas que participan en él o por vosotros mismos, dos consejos: que tenga luz suficiente y que esté grabado en horizontal. Muchos vídeos sorpresa para bodas incluyen fragmentos de vídeo, o bien de invitados que no han podido asistir, o bien de los amigos y familiares contando alguna anécdota.

Asegúrate de tener los vídeos a tiempo, pedirlos con suficiente antelación y cuidado con los vídeos de gran tamaño. Y recuerda NUNCA envíes por Whatsapp fotos y vídeos que quieras que tengan buena calidad y que se vayan a proyectar en un tamaño grande. Whatsapp es una aplicación genial que todos usamos en nuestro día a día pero que comprime muchísimo tanto las fotos como los vídeos para que pesen menos al enviarlos, por lo que no es la mejor opción. Mucho mejor el correo electrónico o sistemas de transferencia de archivos como Wetransfer o Smash, y si no queda más remedio que enviarlos por Whatsapp, siempre, siempre envía las fotos y vídeos como documento, así nunca perderán su calidad original.

Normalmente este tipo de vídeos, especialmente los creados a base de fotos, tienen fotos de los dos por separado y luego fotos en común. Pero volviendo al tiempo, no os paséis. No pongáis 200 fotos de cada uno y 200 fotos en común. Nadie quiere ver un vídeo que dure media hora y que sea muuuy aburrido.

Y finalmente, y volviendo al principio, consultad con el restaurante o salón en qué formato tenéis que entregar el vídeo, llevadlo unos días antes, probad todo bien y aseguraos de que funciona a la perfección.