Una boda es un momento único e irrepetible en la vida de una pareja. Es una celebración de amor, compromiso y unión, y capturar esos momentos especiales en video es una forma maravillosa de revivirlos una y otra vez. Sin embargo, surge una pregunta común entre las parejas y los profesionales del video: ¿es mejor optar por un video de boda corto o uno largo? Ambas opciones tienen sus ventajas y desafíos, y la elección dependerá en última instancia de las preferencias y necesidades individuales de cada pareja.

Vídeo de boda corto

Un vídeo de boda corto puede ser de dos tipos. Uno de ellos sería una especie de trailer o teaser de lo ocurrido en la boda con una duración de alrededor de 3 minutos, creado para resaltar los aspectos más destacados del evento.

En la era de los vídeos cortos en Youtube o Instagram, cada vez más videógrafos además del teaser o highlights hacen vídeos de boda cortos, de unos 15 minutos en los que se incluye toda la boda en un formato mucho más reducido y dinámico, obviando por ejemplo, las lecturas y la ceremonia al completo.

Al tener una duración breve, el video corto se centra en la esencia emocional de la ceremonia y la recepción. Captura los momentos más emotivos y significativos, como los votos matrimoniales, el primer beso como esposos y los momentos de felicidad compartidos con los seres queridos.

Debido a su corta duración, los videos de boda cortos son ideales para compartir en redes sociales y con amigos y familiares. Son perfectos para mantener la atención de los espectadores en una época en la que el tiempo y la paciencia son limitados.

Este vídeo os permite revivir los momentos más emotivos de tu boda en poco tiempo. Es ideal para aquellas parejas que deseen experimentar un recordatorio rápido y conmovedor de su día especial.

Los videos de boda cortos requieren una edición concisa y creativa para contar una historia emotiva en poco tiempo. Esto permite a los videógrafos experimentar con efectos y música para lograr un resultado visualmente atractivo y emotivo.

Vídeo de boda largo

Un video de boda largo, por otro lado, es una versión más extensa y detallada del evento, que suele tener una duración de unos 30 minutos y ofrece una cobertura más completa de la boda, incluyendo momentos más íntimos y discursos completos.

Permite contar la historia completa del día, desde los preparativos hasta el último baile. Incluye más momentos especiales, sobre todo aquellos que ocurren durante la ceremonia, cuando vuestros amigos y familiares os dirigen unas palabras.

Con más tiempo de grabación, los videógrafos capturamos detalles que a menudo pasan desapercibidos en un resumen. Desde la decoración hasta las expresiones de los invitados, un video de boda largo inmortaliza los pequeños detalles que hacen que el día sea especial.

Este tipo de vídeos ofrecen una experiencia cinematográfica, con una narrativa fluida y una progresión bien definida, lo que lo convierte en una experiencia cautivadora y conmovedora.

Y vosotros, ¿qué deberíais elegir?

La decisión entre un video de boda corto y uno largo depende en última instancia de las preferencias personales de la pareja y del propósito que deseen para su video de boda.

Si queréis que tu vídeo de boda sea rápido, conmovedor, quieres compartirlo fácilmente en redes sociales o por whatsapp y con una edición creativa estilo videoclip, el vídeo de boda corto es tu elección.

Si por contra queréis revivir cada detalle, cada momento de manera completa, valoras sobre todas las cosas los discursos y mensajes de la gente que os quiere, y además, queréis una experiencia cinematográfica, el vídeo largo es vuestra elección

Y ¿Por qué no ambos?

Algunas parejas eligen combinar ambos formatos para obtener lo mejor de ambos mundos. Un video corto es perfecto para compartir con amigos y familiares en línea y para tener un resumen rápido y emocionante de la boda. Mientras que un video de boda largo puede reservarse para ocasiones especiales, donde los novios deseen sumergirse completamente en la experiencia cinematográfica y revivir todos los detalles de su día especial.

La elección entre un video corto y uno largo es una decisión personal y única para cada pareja. Ambos formatos tienen su propio encanto y beneficios. La clave está en comprender qué tipo de experiencia deseas obtener de tu video de boda y comunicar claramente tus expectativas al videógrafo. Sea cual sea tu elección, un video de boda bien hecho será un tesoro preciado que te permitirá revivir esos momentos mágicos una y otra vez, consolidando el amor y la emoción de tu gran día para toda la vida.