Todo parte del momento en el que una de las partes de la pareja pronuncia la frase: ¿quieres casarte conmigo? Si la respuesta es si (que es lo habitual) comienza ese proceso tan loco que es organizar una boda.
La preparación de una boda.
Cuando ya habéis decidido que os queréis casar y comenzáis a prepararlo todo, os dais cuenta de lo que supone organizar una boda. Supone organizar mil cosas, estar pendientes de muchos detalles y si habéis decidido no contar con la ayuda de un wedding planner, que se suelen encargar de todo, el proceso puede ser largo, en ocasiones tedioso y costoso (y no me refiero solamente al dinero)
Así que allá vamos, con una serie de tips o consejos para sobrellevar la preparación de una boda.
Lo primero es lo primero. ¿Cuándo? Elegir la fecha para casarse y muchas veces no es fácil, ya que puede variar por muchos factores. Y después del cuándo, otras cuantas preguntas que hacerse. ¿Ceremonia religiosa o civil? Si la ceremonia es civil, ¿una ceremonia en la que nos casen en el acto o una ceremonia emotiva, pero ya venir casados de antemano? ¿Elegimos una finca o un restaurante tradicional?
Cuándo.
Como os digo, elegir una fecha para casarse no es fácil, y depende de muchos factores. El primero, y fundamental, es cuándo queréis hacerlo. Hay parejas que por nada del mundo se casarían en invierno, otras que no quieren renunciar a que su boda sea al aire libre y tiene que ser si o si en verano y otras que tienen ilusión por hacerlo a lo grande, en la catedral o iglesia más importante de su pueblo o ciudad.
Sí que es superimportante conocer la disponibilidad del sitio donde os queréis casar, ya sea del restaurante, la iglesia, juzgado, salón del ayuntamiento o del sitio que sea. Lo normal es que una boda se comience a preparar dos años antes de que se celebre, así que las fechas se suelen cerrar con mucha antelación.
Tipo de ceremonia.
Cuando comenzamos con la preparación de una boda lo habitual es que os preguntéis si queréis casaros en en una ceremonia civil o bien en una religiosa, según vuestros gustos y creencias. Si tenéis pensado casaros en una ceremonia religiosa, lo primero que debéis saber es que no todas las religiones pueden celebrar bodas religiosas con validez legal. Actualmente, en España solo las bodas celebradas bajo el rito católico, islámico, judío o evangelista tienen validez legal. Por ejemplo, si queréis celebrar vuestra boda bajo el rito hindú, deberéis saber que legalmente no tiene validez, así que deberéis casaros por lo civil antes o después de la celebración del rito.
Pasamos así al segundo tipo de ceremonias, que ya suponen la gran mayoría de las que se celebran. Sí, hablamos de las ceremonias civiles. Las ceremonias civiles en realidad son un mero trámite legal, en las que se comprueba que no hay impedimentos para que se celebre el matrimonio, se lee a los contrayentes los artículos correspondientes del código civil, se les pregunta si quieren contraer matrimonio, se firma el acta y se acabó la ceremonia. Se han convertido tan en un trámite, que incluso en la actualidad es posible que nos case un notario.
Evidentemente, una ceremonia civil no tiene por qué ser un acto frío y meramente administrativo como si fuésemos a firmar las escrituras de nuestra casa. Pueden ser bonitas y emotivas a la vez. Para hacer una ceremonia civil podemos escoger entre muchos espacios como ayuntamientos, juzgados o fincas.
Ayuntamientos.
Las ceremonias en los ayuntamientos las suele celebrar algún concejal o el mismo alcalde. Tienen validez legal y o bien se celebran en el salón de actos del ayuntamiento o bien en algún espacio que tengan habilitado. Suelen ser ceremonias emotivas en las que los amigos o familiares pueden realizar lecturas o dedicarles unas palabras a los novios y se realiza el intercambio de alianzas, además de la posterior firma. Por mi experiencia en el mundo de las bodas, tienen un inconveniente y es que se suelen concentrar muchas bodas en un mismo día (por ejemplo los sábados) y dado que después de que os caséis, seguramente vendrá otra pareja a casarse, el tiempo para la ceremonia no suele ser excesivo y aunque a veces se permite que alguien os dedique unas palabras, no se puede alargar mucho en el tiempo.
Juzgados.
Las ceremonias en el juzgado se suelen celebrar en algún salón de actos que tenga el juzgado. Suelen ser más frías, ya que el juez que os case se limitará únicamente al aspecto legal del matrimonio. Se suele permitir el intercambio de alianzas, pero al igual que en los ayuntamientos, se suelen realizar varias bodas el mismo día, con lo que las lecturas y dedicatorias quedan prácticamente eliminadas de la ceremonia.
Fincas.
Cuando celebramos nuestra boda en una finca nos podemos encontrar con dos supuestos. El primero es que a la finca acuda a casarnos algún concejal o juez de la zona y que la boda se celebre en el acto, tal y como si fuésemos al juzgado o al ayuntamiento. El segundo es que la finca tenga un oficiante que haga de casandero, pero que la ceremonia no tenga validez legal y tengáis que casaros antes o después de manera legal.
En cualquiera de los dos casos (y bajo mi punto de vista) son las ceremonias más interesantes y emotivas. Al eliminar la limitación de tiempo, además de que el oficiante os recordará los aspectos legales y os preguntará si queréis contraer matrimonio, vuestros familiares y amigos os podrán dedicar más tiempo para deciros cosas bonitas el día de vuestra boda, con lo que tendréis un recuerdo inolvidable.
Donde
Llegamos al punto donde deberéis decidir donde os queréis casar y sobre todo donde lo vais a celebrar. Escoger un buen restaurante acorde a vuestros gustos y presupuesto es fundamental. A partir de ahí tendréis que decidir si lo vais a celebrar todo en el mismo lugar (por ejemplo, una finca) donde os casaréis y lo celebraréis, o si, por el contrario, vais a hacer una ceremonia religiosa en un lugar y la celebración posterior va a ser en un restaurante o en una finca.
Como veis, las opciones para la preparación de una boda son muchas y muy distintas. Escoged bien, dedicadle tiempo, decidid minuciosamente donde y cómo os queréis casar y sobre todo ¡disfrutad de vuestro día!