En los últimos años se han puesto muy de moda las fincas para bodas en Madrid. Las hay para todos los gustos. Rústicas, modernas, acogedoras o individuales. Todas suelen tener algo en común: grandes espacios verdes, un entorno diferente al típico salón de bodas y un lugar de celebración más o menos privado, en el que poder disfrutar de vuestra boda únicamente con vuestros invitados.
Hace años los salones de bodas eran sitios enormes, con grandes espejos, lámparas de araña colgadas del techo y en general situados en el centro de las ciudades. Hoy en día la mayoría de las bodas se celebran en alguna finca en las afueras y saber cómo elegirla es muy importante de cara a cómo se celebrará el día de vuestra boda.
Elegir fincas para bodas en Madrid no es fácil. Hay multitud de opciones, multitud de precios y multitud de ambientes en los que celebrar una boda.
El primer aspecto a tener en cuenta a la hora de elegir Fincas para bodas en Madrid es la capacidad. No en todas las fincas pueden ubicar correctamente a 300 invitados, ni todas las fincas para bodas celebran bodas pequeñas. Si la boda es en verano y al aire libre, es muy importante tener en cuenta si hay previsto algún espacio cerrado en caso de lluvia o de que el tiempo empeore. No es la primera boda a la que voy en verano, bajan las temperaturas por la noche, empieza a hacer frío y la finca no tiene ningún lugar habilitado para celebrar la boda a cubierto, si no que sólo dispone de un espacio al aire libre.
El segundo aspecto que considero importante es la privacidad. Hay muchas fincas que comparten espacio por que celebran varias bodas a la vez. Si la finca está bien organizada, tanto en sus espacios como en sus accesos no habrá ningún problema. Pero si no lo está, tus invitados se mezclaránn con otros, habrá problemas de aparcamiento, te cruzarás con otras parejas de novios, o tendrás que esperar tu turno para casarte si la ceremonia se celebra en la misma finca. 2
La finca deberá tener diferentes espacios, tanto para la ceremonia si se celebra en la finca, como para el cóctel y el banquete. Algunas fincas tienen lugares habilitados para que bailéis y otras celebran el baile en el mismo salón, pero es importante tener muy claro con qué espacios cuenta cada finca. Igualmente deberán ofrecer aparcamiento, y no solo para los vehículos de los invitados, si no también para autobuses si decidís ofrececer a vuestros invitados ese servicio.
El menú a la hora de elegir fincas para bodas es uno de los aspectos más importantes. En función del menú, de la calidad de los platos y de su elaboración, puede haber diferencias muy importantes en cuanto al precio. Y no hablo únicamente del menú, si no del cóctel anterior. En los últimos tiempos se ha puesto de moda celebrar bodas en lugares que en principio no están habilitados como restaurante, por lo que no tienen cocinas y toda la comida procede de un cátering. Esto, que en principio puede facilitar la organización de la boda, puede suponer un problema en caso de que surja cualquier imprevisto, haya que realizar cualquier plato especial para niños, alérgicos o embarazadas.
El último aspecto a tener en cuenta en esta serie de recomendaciones para la elección de fincas para bodas es el entorno. En realidad este aspecto se podría considerar como el más importante, ya que es lo primero que vemos cuando acudimos a ver una finca para bodas. Cómo es, donde está ubicado, sus accesos, los jardines que tiene… Y hay que tenerlo todo en cuenta. Muchas veces podemos estar en un entorno maravilloso celebrando nuestra boda, pero no nos damos cuenta de que para acceder a la finca hay un camino lleno de baches que hay que recorrer durante 4 kilómetros. O que la finca donde celebraremos nuestra boda está justo al lado de una carretera, con lo cual el ruido de la carretera se mezcla con la ceremonia o con el cóctel.
Después de mucho ver, mirar y volver a mirar, terminaréis haciendo una selección de 2 o 3 fincas para bodas en Madrid, entre las cuales, seguro que hay una que encaja perfectamente con vosotros para celebrar el gran día de vuestra boda.